Los amorachinis, también conocidos como amulachinis o mulachinis del cielu, son unos espíritus aéreos del folklore de las Hurdes, comarca extremeña localizada en el norte de Cáceres. Estos personajes son de pequeña estatura, muy similares a bebés aunque tan solo cuentan con un ojo como los cíclopes.
Van vestidos con recias indumentarias de cuero ya que, a parte de jugar y retozar entre las negras nubes de tormenta, también se dedican a forjar en el volcán de El Gasco los rayos y relámpagos que luego lanzan a la tierra con certera puntería. Para protegerse de sus rayos, los vecinos de las Hurdes clavaban en los montes cruces trenzadas con torvisco, planta a la que se le atribuían propiedades contra el mal de ojo y espíritus malignos.
Van vestidos con recias indumentarias de cuero ya que, a parte de jugar y retozar entre las negras nubes de tormenta, también se dedican a forjar en el volcán de El Gasco los rayos y relámpagos que luego lanzan a la tierra con certera puntería. Para protegerse de sus rayos, los vecinos de las Hurdes clavaban en los montes cruces trenzadas con torvisco, planta a la que se le atribuían propiedades contra el mal de ojo y espíritus malignos.
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Ilustración de Victoria Inglés para Leyendas, misterios y seres mágicos de Las Hurdes, de Israel J. Espino |
Fuentes
Jiménez, Íker: El paraíso maldito. Editorial EDAF, Madrid (2003).Jiménez Espino, Israel: Leyendas, misterios y seres mágicos de las Hurdes. Mancomunidad Comarca de las Hurdes (2024).
Revista de Folklore nº 434. Fundación Joaquín Díaz (2018).
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