Era muy inteligente, aunque con una mente un tanto retorcida. Este demonio sugirió prenderle fuego al cielo, pero fue arrojado al infierno por el arcángel Miguel antes de ello.
Ahora está al cargo de mantener encendidas eternamente las llamas del infierno. Tiene un fuelle como emblema, pero debe avivar las llamas del abismo soplando con su boca o usando sus manos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario